martes, 23 de marzo de 2010

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la marisel Sandoval y su embarazo x Skype @mariels76

Marisela de los Rosales Sandoval (@mariels76)

Es hija dE una mucama q vivió para trabajar para la familia d Maripaz Escalante de las Fronteras (@carla_york) nunca supo quien fue su padre pues su madre lo ocultó celosamente.

De niña creció a la par d Maripaz q al verla tan pobre y falta d cariño q se apiadó d ella y se hizo su amiga, tanto q eran casi hermanas. Maripaz le regalaba sus muñecas usadas al igual q sus vestidos. Marisel se sentía como en el palacio, sin saber que el día d mañana terminaría sirviéndole a Maripaz. Eran inseparables hasta q llegó el cumpleaños numero 10 d Maripaz, en el q estuvo toda la Sociedad y por ende las niñas mas ricas y malvadas de la ciudad. Marisela se puso sus mejores galas para el evento q consistía en un vestido de Valentino (línea infantil) q había pertenecido a Maripaz y q tan generosamente se lo había regalado luego d usarlo una vez, (Maripaz nunca usaba un mismo vestido dos veces). Las niñas que se dieron cuenta q era de la temporada anterior se empezaron a burlar d la pobre Marisela q no entendía porque tanto odio y Maripaz para no quedar mal con sus amigas ricas se burlo también de ella. Desde entonces al amistad entre ellas no fue igual a pesar de q Maripaz la quiso convencer de q todo fue un juego.

Marisela creció llena d odio y resentimiento pero muy solitaria, al igual q su madre comenzó a servir a la familia Escalante de las Fronteras. Pensó q su soledad acabaría cuando ingresó al servicio un joven guapo y musculoso q se hacia llamar Cheito quien había sido contratado para ser el jardinero. Ni bien la vio Cheito le echo el ojo a Marisela q era d buen ver. Ella sucumbió a sus encantos y chamuyos. Comenzaron a salir e incluso Marisela pensaba darle la prueba de amor hasta que un día lo pillo en brazos de la mucama de la familia vecina. Marisela sintió q se le vino el mundo abajo, pero juro q lo olvidaría, cosa q se le haca difícil porque compartían el mismo lugar de trabajo entonces Marisela llegó a la conclusión de q uno no se debe enamorar de un compañero de trabajo.

Pasado el tiempo y noches enteras de lágrimas un dia en que estaba limpiando la habitación de Maripaz vio la Sony Vaio color Rosa chicle encendida y escucho que alguien hablaba desde el monitor. Es que Maripaz sin darse cuenta y salir apurada a su clase de chi-kun no cerró su sesión de skype. Marisela curiosa se acerco y escucho una voz que la cautivaría pero q no podía ver su imagen porque estaba demasiado oscuro. El extraño comenzó una charla con Marisela quien cautivada por la tecnología y la voz del extraño no paraba de hablar. Desde entonces y cada vez que Maripaz se iba a su clase Marisela se conectaba (ella habia aprendido a iniciar la sesión viendo a escondidas como Maripaz lo hacia) Cada vez las charlas eran mas amenas divertidas y subidas de tono, el extraño de voz cautivadora le prometió que nunca la lastimaría, que la estimaba mucho primero como persona y después como mujer. Marisela se sintió que tocaba el cielo al fin encontró a alguien q la cuidaría, entonces un día decidió entregarse toda, tuvieron su primera relación sexual vía skype. A partir de ese momento cada vez que se conectaban lo hacían, quedaron un día en encontrarse cara a cara para poder consumar la relación 2.0 Pero en ese preciso momento el se arrepintió diciéndole que estaba confundido, que no tenia tiempo ni ganas para una relación 1.0. Desde entonces la pobre Marisela no supo más de él porque la había bloqueado en el skype.

Lo que mas le daba bronca es que no pudo nunca ver su cara solo su voz cautivadora que nunca la olvidaría. Con el correr de los días Marisela comenzó a sentir los primeros síntomas de un embarazo. Ella se decía cómo puede ser si nunca estuve con un hombre. Lo que ella no sabía es que de una relación 2.0 también se podía quedar embarazada, más aun si en antivirus era Mcaffe Bajo la mirada inquisidora de su madre y de la familia Escalante Marisela llevo su embarazo en soledad y juró vengarse de todos los q la despreciaron y sobre todo del hombre del skype.

Se propuso instruirse, tomó cuanto curso gratuito había en Internet. Hasta se transformó en SEO e hizo mucho networking en Corrientes valley y fue a muchos BOBEX (XD). Un dia en la casa de los Escalante escucho el nombre de un hombre, enemigo de la familia: Celestino Milton Menendez Brown (@carlospirovano) y se dijo así misma me tengo que contactar con este hombre él me ayudará en mi venganza de mujer. Al pasar los años y bajo la tutela de Milton Marisela comete todo tipo de atrocidades, le pasa data de los negocios del la familia Escalante, hackea el disco rígido de la Cía, coloca cámaras espía tanto en la casa como en las empresas, pincha los teléfonos.

Mientras tanto se da cuenta de q su hijo no es como todos los demás niños de su edad, Milton le aconseja que le haga un examen d ICQ. Para su asombro su hijo Santos de los Rosales Sandoval tenia un ICQ 350. Al ver esto Milton decide apadrinarlo para poder usarlo en el futuro como aliado.

jueves, 18 de marzo de 2010

Maria begonia (@lipitus)

personaje : Maria begonia
interpreta :@lipitus
orientacion sexual : hetero
mala, muy mala
Virgen


una genia cientifica del mal. Esta re buena.
Sus padres la educaron como una nerd nunca pudo ejercer la medicina. Hiperracional
mi objetivo es Maripaz, le quiero hacer la vida imposible y todas las maldades posible.
mi mejor amigo y secuaz es @gemiliano.
no me cae bien @carlospirovano, no se porque , pero no confie en el-.
asi que si se cruza en mi camino lo hago #cagarfuego-

Nuria Alplax (@paulyn1979)

@paulyn1979 se llama en realidad Nuria Alpax, como su madre tenia relaciones poco serias, engancho al Sr. Alplax quien fue el que la reconcio, pero murio de sobredosis al poco tiempo de su nacimiento.
La pobre Nuria se crio sin padre y sus 5 años su madre dio a luz a @mafaldachan, de quien no cuento con muchos datos.
Esta chica siempre estuvo buscando una imagen de padre, y se encariñaba con los novios/maridos de su madre, el dia que llega a la casa de la flia Izaguirre Linares, siente que por fin va a encontrar un padre.
El problema es que se da cuenta que el Sr. Izaguirre Linares, poca bola le pasa a ella y a su hermana, es ahi cuando empieza a odiar a la pobre Jacquelín (@tiabelencita).
Cuando Jacquelin conoce a Sir Pedro Alicante de las Colinas (@sebas_sir), decide que lo queria para ella, no porque, le gustara (@sebas_sir) sino en venganza de la Jacquelin.
En el fondo ella esta buscando alguien que la quiera, pero no puede evitar ser influenciada por su madre.
Cuando sufre el accidente, y pierde la memoria la buena de Jacquelin la ayuda pero....

Emilia (@verinnsala)

Emilia (@verinnsala) también conocida como Tamara durante las noches de sunset, llevaba una doble vida en la city porteña desde hacía más de dos años, cuando su padre la dejo a cargo amigo. Amigo que resulto gerente de Sunset y la sometería con el tiempo a la mediocre vida de la noche.
Por las mañanas se encargaba de atender el negocio de la amiga. Emilia, tenía desde hace un mes una relación casual con un cliente @pipus23, que comenzó con Malboro y chocolatitos Jack’s. Inmediatamente de un par de salidas, se planteo como opción una vida junto a él donde todo sería lejos de la vida nocturna y con comodidades económicas.
Luego de empezar con @pipus23, por negocios se mudan a otra ciudad, pero allí sería cuando vivirá en carne propia el sabor de la mafia, drogas y dinero mal ganado.
Se alojarán por un tiempo en la casa del socio de @pipus23, no era ni más ni menos que @ReydePilos, quién aprovecharía el momento de debilidad de Emilia, y juntos caería en las redes de la tentación.
Entre engaños conoce a su vecina @agosmorlini, quién es maltratada por su marido @PISANLOV, y tras una relación de amistad y desamor ambas permiten florecer esa atracción.
La vida en Sunset le enseñó a Emilia a mantener relaciones y ser mujer de muchos luego de perder a su gran y único amor @pablovester.
Pero es aquí donde el amor deja de ser amor y sólo se convierte en atracción cuando @ReydePilos cae en las redes de @agosmorlini, una relación que luego tendría como fruto un hijo no deseado.
Esta noticia logró que @pipus23 deje de dudar de la relación de su socio con su mujer.

domingo, 14 de marzo de 2010

La Jacquelín Izaguirre Linares (@tiabelencita)



La Jacquelín Izaguirre Linares (@tiabelencita), hija de un comerciante del valle, disfrutó de una niñez acomodada hasta que muere su madre y seis meses despues su padre se casó con una viuda de dudoso prontuario, quien llevó a sus dos hijas a vivir a su nuevo hogar (@paulyn1979 y @mafaldachan).

Tanto la madrastra como las dos hermanastras hicieron la vida muy complicada a nuestra Jacquelín. Ella de golpe no sólo se vió obligada a realizar las labores domesticas, sino que también tuvo que dejar su cuarto y dormir en el minúsculo cuarto de servicios, para que las hermanitas no tuvieran que dormir separadas y así minimizar el desarraigo que vivían desde pequeñas. Su madre nunca había tenido una pareja estable y las habia arrastrado con ella por cuanta casa de hombre paso por su cama.

Su padre pasaba día y noche tratando de que las crisis que continuamente ha sufrido nuestro país no llevaran su comercio a la quiebra por lo cual era ajeno a lo que sucedía en su hogar. De este modo, y siempre con su afán de complacer y no generar inconvenientes, la Jacquelín cumplió siempre y sin chistar con las demandas de su madrastra. El resto del tiempo, lo dedicaba a estudiar para poder terminar el colegio e irse a estudiar a Buenos Aires. No le sobraba el tiempo ni energía para hacer amigos y mucho menos algún noviecito. No conoció boliche alguno de la zona ya que sus hermanas nunca la invitaban por no tener ropa copada para salir con ellas. Ni siquiera intentaron jamás prestarle ropa de ellas, porque claro, ambas eran el doble de tamaño que la Jacquelín y que esta se la probase ya las hacia sentir excedidas de peso y mas feuchitas que su hermanastra.

Cuando estaba terminando quinto año, la familia de los Alicante de las Colinas dá un semejante fiestón en su mansión de la colina. Invitaron a toda la gente mas cool valle y por supuesto asistieron todas las jóvenes solteras dispuestas a enganchar al galancito de la familia: Sir Pedro Alicante de las Colinas (@sebas_sir).


La madrastra y las hermanastras de la Jacquelín se quisieron matar porque la invitación llego a la oficina del padre, quien accedió a que fueran solo si iban con la Jacquelín. Ellas sabían que no les convenía porque todas sabemos que no es negocio salir con una amiga que este más buena que una, así que hicieron todo lo posible para que ella desistiera de ir. Pero como la Jacquelín estaba muy emocionada porque ya se lo había cruzado en el valle a Pedro y había quedado prendada de esos hermosos ojos verdes, por primera vez en su vida no se dejó avasallar y pudo rebatir cada una de las excusas salvo una: no tenía la vestimenta adecuada.

La Jacquelín entonces se fué de shopping con sus magros ahorros pero como no era época de rebajas no encontró ningún vestido que pudiera pagar. Triste y apesadumbrada se sentó en uno de los silloncitos de Starbucks buscando en su bolso las monedas para el colectivo y allí conoció a Maripaz Escalante de las Fronteras (@carla_york) quien se convertiría en ese momento y para siempre en su mejor amiga y hermana del alma.



Maripaz, una chica muy top y extrovertida, le pidió que le cuente el motivo de sus lágrimas mientras la invitaba con un frapuccino y luego de escuchar su triste historia decidió ayudarla. Le regaló un vestido de los tantos que ella tenia y zapatos y accesorios haciendo juego, con los cuales quedó al descubierto toda la belleza interior y exterior de la Jacquelín, deslucida por tantos años de tareas del hogar y de postergar la lectura de la Cosmopolitan. Gastó entonces sus pocos pesos para actualizar su peinado y hacerse las manos y pies en Cerini y ya casi se sentía una princesa.

Así la conoció Pedro la noche de la fiesta, quien apenas la ve le dijo algo así como: “Yo me caso con vos, no zafás “ y no se le despegó en toda la noche. Ella sonreía sin parar y brillaba. El la miraba y no dejaba de seducirla porque había quedado realmente atrapado por su sonrisa.

Como la madrastra no le había dado dinero a ella para que volviera en remisse, tenía que tomarse el último colectivo. Le daba mucha vergüenza decírselo a Pedro, así que mientras el va a buscarle un Malibú con piña, ella se calzó las havaianas para poder correr al colectivo porque ya eran casi las doce y escapó de la fiesta, sin darse cuenta que había dejado los stilettos al lado del puff donde esperaba a Pedro.

Cuando Pedro volvió y se encontró solo con los zapatos, se dió cuenta que no quería dejar pasar la oportunidad de conocerla. Preguntó entre sus amigos tratando de averiguar donde vivía con la intención de buscarla al día siguiente pero nadie la conocía. Y las hermanastras, odiadas de que la Jacquelín haya sido el centro de atención de Pedro, la desconocieron.


Gracias a las fotos que sus amigos subieron a Facebook, un amigo de un amigo de una amiga la reconoció del colegio y le pasó la info un par de días después.

Y así, sin más, fue a buscarla, le devolvió los zapatos de Maripaz y no se separaron nunca más.

A partir de ese momento sus hermanastras juraron vengarse eternamente de ella y prometieron arrebatarle el amor de Pedro, aunque para eso tuvieran que deshacerse literalmente de ella.



viernes, 12 de marzo de 2010

El cuento del niño malo

Iba a escribir un post sobre las motivaciones de ser malo en la vida, sobre lo relativo de la maldad y las tesis de Blake y Mandeville sobre el infierno y esas cosas, cuando me acordé del cuento del niño malo de Mark Twain y me dí cuenta que no había relato que explicara mejor lo que quería transmitir.

Se lo transcribo. Lo unico que tienen que hacer es poner Celestino Milton Menendez Brown en donde el pícaro de Mark Twain pone Jim y todo será transparente.

Había una vez un niño malo cuyo nombre era Jim. Si uno es observador advertirá que en los libros de cuentos ejemplares que se leen en clase de religión los niños malos casi siempre se llaman James. Era extraño que éste se llamara Jim, pero qué le vamos a hacer si así era.

Otra cosa peculiar era que su madre no estuviese enferma, que no tuviese una madre piadosa y tísica que habría preferido yacer en su tumba y descansar por fin, de no ser por el gran amor que le profesaba a su hijo, y por el temor de que, una vez se hubiese marchado, el mundo sería duro y frío con él.

La mayor parte de los niños malos de los libros de religión se llaman James, y tienen la mamá enferma, y les enseñan a rezar antes de acostarse, y los arrullan para que se duerman con su voz dulce y lastimera; luego les dan el beso de las buenas noches y se arrodillan al pie de la cabecera a sollozar. Pero en el caso de este muchacho las cosas eran diferentes: se llamaba Jim, y su mamá no estaba enferma, ni tenía tuberculosis ni nada por el estilo.

Antes por el contrario, la mujer era fuerte y muy poco religiosa; es más, no se preocupaba por Jim. Decía que si se partiera la nuca no se perdería gran cosa. Sólo conseguía acostarlo a punta de cachetadas, y jamás le daba el beso de las buenas noches; antes bien, al salir de su alcoba le jalaba las orejas.

Este niño malo se robó una vez las llaves de la despensa, se metió a hurtadillas en ella, se comió la mermelada y llenó el frasco de brea para que su madre no se diera cuenta de lo que había hecho; pero acto seguido... no se sintió mal, ni oyó una vocecilla susurrarle al oído: “¿Te parece bien hacerle eso a tu madre? ¿No es acaso pecado? ¿Adónde van los niños malos que se engullen la mermelada de su santa madre?”, ni tampoco, ahí solito, se hincó de rodillas y prometió no volver a hacer fechorías, ni se levantó, con el corazón liviano, pletórico de dicha, ni fue a contarle a su madre cuanto había hecho y a pedirle perdón, ni recibió su bendición acompañada de lágrimas de orgullo y de gratitud en los ojos. No; este tipo de cosas les sucede a los niños malos de los libros; pero a Jim le pasó algo muy diferente: se devoró la mermelada, y dijo, con su modo de expresarse, tan pérfido y vulgar, que estaba “de rechupete”; metió la brea, y dijo que ésta también estaría de rechupete, y muerto de la risa pensó que cuando la vieja se levantara y descubriera su artimaña, iba a llorar de la rabia. Y cuando, en efecto, la descubrió, aunque se hizo el que nada sabía, ella le pegó tremendos correazos, y fue él quien lloró.

Una vez se encaramó en un árbol, donde Acorn, el granjero, a robar manzanas, y la rama no se quebró, ni se cayó él, ni se quebró el brazo, ni el enorme perro del granjero le destrozó la ropa, ni languideció en su lecho de enfermo durante varias semanas, ni se arrepintió, ni se volvió bueno. Oh, no; robó todas las manzanas que quiso y descendió sano y salvo; se quedó esperando al cachorro, y cuando éste lo atacó, le pegó un ladrillazo. Qué raro... nada así acontece en esos libros sentimentales, de lomos jaspeados e ilustraciones de hombres en sacoleva, sombrero de copa y pantalones hasta las rodillas, y de mujeres con vestidos que tienen la cintura debajo de los brazos, y que no se ponen aros en el miriñaque. Nada parecido a lo que sucede en la clase de religión.

Una vez le robó el cortaplumas al profesor, y temiendo ser descubierto y castigado, se lo metió en la cachucha a George Wilson... el pobre hijo de la viuda Wilson, el niño sanote, el niñito bueno del pueblo, el que siempre obedecía a su madre, el que jamás decía una mentira, al que le encantaba estudiar y le fascinaban las clases de religión de los domingos. Y cuando se le cayó la navaja de la gorra, y el pobre George agachó la cabeza y se sonrojó, como sintiéndose culpable, y el maestro ofendido lo acusó del robo, y ya iba a dejar caer la vara de castigo sobre sus hombros temblorosos, no apareció de pronto para pasmo de todos, un juez de paz de peluca blanca, que dijera indignado: “No castigue usted a este noble muchacho... ¡Aquél es el solapado culpable!: pasaba yo junto a la puerta del colegio en el recreo, y aunque nadie me vio, yo sí fui testigo del robo”. Y, así, a Jim no lo reprendieron, ni el venerable juez les leyó un sermón a los compungidos colegiales, ni se llevó a George de la mano y dijo que tal muchacho merecía un premio, ni le pidió después que se fuera a vivir con él para que le barriera el despacho, le encendiera el fuego, hiciera sus recados, picara leña, estudiara leyes, le ayudara a su esposa con las labores hogareñas, empleara el resto del tiempo jugando, se ganara cuarenta centavos mensuales y fuera feliz. No; en los libros habría sucedido así, pero eso no le pasó a Jim. Ningún entrometido vejete de juez pasó y armó un lío, de manera que George, el niño modelo, recibió su buena zurra y Jim se regocijó porque, como bien lo saben ustedes, detestaba a los muchachos sanos, y decía que éste era un imbécil. Tal era el grosero lenguaje de este muchacho malo y negligente.

Pero lo más extraño que le sucediera jamás a Jim fue que un domingo salió en un bote y no se ahogó; y otra vez, atrapado en una tormenta cuando pescaba, también en domingo, no le cayó un rayo. Vaya, vaya; podría uno ponerse a buscar en todos los libros de moral, desde este momento hasta las próximas Navidades, y jamás hallaría algo así. Oh, no; descubriría que indefectiblemente cuanto muchacho malo sale a pasear en bote un domingo se ahoga: y a cuantos los atrapa una tempestad cuando pescan los domingos infaliblemente les cae un rayo. Los botes que llevan muchachos malos siempre se vuelcan en domingo, y siempre hay tormentas cuando los muchachos malos salen a pescar en sábado. No logro comprender cómo diablos se escapó este Jim. ¿Será que estaba hechizado? Sí..., ésa debe ser la razón.

Nada malo le pasaba. Llegó incluso hasta el extremo de darle una tableta de tabaco a un elefante del zoológico, y éste no le dio en la cabeza con la trompa. Esculcó la despensa buscando esencia de hierbabuena, y no se equivoco ni se tomó el ácido muriático. Robó el arma de su padre y salió a cazar el sábado, y no se voló tres o cuatro dedos. Se enojó y le pegó un puñetazo a su hermanita en la sien, y ella no quedó enferma, ni sufriendo durante muchos y muy largos días de verano, ni murió con tiernas palabras de perdón en los labios, que redoblaran la angustia del corazón roto del niño. Oh, no; la niña recuperó su salud.

Al cabo del tiempo, Jim escapó y se hizo a la mar, y al volver no se encontró solo y triste en este mundo porque todos sus seres amados reposaran ya en el cementerio, y el hogar de su juventud estuviera en decadencia, cubierto de hiedra y todo destartalado. Oh, no; volvió a casa borracho como una cuba y lo primero que le tocó hacer fue presentarse a la comisaría.

Con el paso del tiempo se hizo mayor y se casó, tuvo una familia numerosa; una noche los mató a todos con un hacha, y se volvió rico a punta de estafas y fraudes. Hoy en día es el canalla más pérfido de su pueblo natal, es universalmente respetado y es miembro del Concejo Municipal. Fácil es ver que en los libros de religión jamás hubo un James malo con tan buena estrella como la de este pecador de Jim con su vida encantadora.